13-06-08

Hace poquito quize escribirte una carta, quize hacerlo con todo el amor de mi corazon, descubri que quedaba muy poquito amor por ti en mi corazon, olia a cuento viejo, como esos libros que se les pegan las paginas y leerlos te resulta tan confuso como no entender la historia en secuencia lineal.

Y eso eras tu, habia perdido el principio pero sabia muy bien donde estaba el final, era todo lo que veia, era todo lo que quedaba de ti.

Y te escribi tu carta, empeze por contarte lo significante y maravilloso que fue el hecho de tenerte en mi vida, como te extrañe el dia que no te tuve, como conoci el dolor el dia que mas fuerte pusiste tu mano en mi, el hecho de tenerte, pero a la vez tener todo lo malo de ti, eso que nunca va a cambiar, eso que siempre prometiste ocultar pero era lo que mas me enseñabas.

Continue contandote como tuve que resignarme a que te fueras, me guarde la sorpresa de tu cumpleaños, por tu culpa deje de verme al espejo, deje de disfrutar tantas cosas, aprendi a asumir otras tantas.

y nunca regresaste, realmente añoraba tu regreso, realmente lloraba tu ausencia.

Y asi es como termine la carta, explicandote que en esta vida lo mas maravilloso no es cuantas cosas acumulas, esas que se van gastando con el tiempo y se llenan de polvo en un rincon, que lo mas importante es aquello que muchas veces tienes un dia en la mano y terminas maltratando o lastimando, que lo mas increible era el amor porque siempre rebasaria nuestro conocimiento sobre el, que todo a tu lado era increible como increible era no tenerte ya a mi lado, termine diciendote que lo que tu me enseñaste traspasa mi entendimiento presente pero me encamina hacia un buen futuro, que no es facil escribir eso; que es imposible resignarse a algunos cambios, que no existe remedio certero para un corazon roto, que eso que tanto buscabas y me contabas no eran mas que cuentos que yo sabia muy bien no eran reales.

Y ese era mi punto principal, como a veces nos dejamos llevar, yo sabia que no era cierto y continue, yo sabia que me veias la cara y yo te veia a los ojos, yo sabia que jamas alcanzaria a terminar de conocerte y me atrevi.

Y al final firme la carta.

No era mas que otro atrevimiento.

y al depositarla en tu buzon continue con lo que siempre habia hecho de forma natural, ser yo, ser tu, ser alejandro, ser quien fuera que era yo.

y sabia muy bien quien no entraba en ese plan.

Tu.